Réquiem por una mujer, de William Faulkner, sitúa su mirada en la conciencia de Temple Drake —ahora madre y esposa— mientras intenta interceder por Nancy Mannigoe, la sirvienta condenada por matar a su hija. Más que un juicio legal, la novela es una confesión íntima y dramática, escrita en tono argumentativo y casi teatral, que indaga en los abismos del pasado y en la culpa que la palabra busca expiar. Puedes leer la reseña completa en Cicutadry aquí.
© Jaime Molina